Los gatos son mascotas muy especiales y hay que saber cómo tratarlos adecuadamente. Por este motivo, en este artículo de la Escuela de Veterinaria de Campus SEAS te contamos las cosas que no debes hacerle a tu gato. ¡Vamos allá!
Negarle atención y cariño
Los gatos necesitan interacción social y debes dedicarles tiempo y atención cada día. Muchas veces tu querrás tener un gesto cariñoso con ellos y en ese momento a ellos no les apetecerá, así que cuando ellos se acerquen a ti es conveniente que le hagas caso.
No permitirle ejercitarse
Los gatos necesitan ejercitarse y jugar diariamente para mantenerse saludables y felices. Por tanto, asegúrate de que tiene juguetes y que puede realizar su ejercicio diario en el lugar en el que vive.
Realizarle la desungulación
Lamentablemente todavía está permitida en varios países la desungulación, que es un procedimiento quirúrgico para extraerle las garras al gato con el fin de que no pueda arañar nada en la casa. Se trata de una práctica cruel que impide al gato manifestarse libremente, así que es preferible que le eduques para que solo arañe en sus rascadores y juguetes.
Negarle atención médica
Debes llevar a tu gato al veterinario regularmente para asegurarte de que tiene un buen estado de salud. Algunos síntomas de que algo no va bien son la salivación excesiva, la fiebre, los vómitos, los maullidos anómalos, el comportamiento agresivo, la diarrea o la pérdida del apetito.
Reñirle
Cuando compartes una casa con un gato es normal que haya situaciones que te saquen de tus casillas. Sin embargo, reñirle o castigarlo no es algo recomendable, pues el gato no entenderá el porqué de tu enfado y solo generará desconfianza hacia ti y situaciones de estrés para tu gato.
No respetar sus límites
Los gatos son animales muy independientes y en muchos momentos les gusta estar tranquilos. Aunque a veces les gustan los mimos y los cariños de sus humanos, lo cierto es que hay que saber identificar cuándo sí están receptivos y cuándo prefieren estar a su bola sin que nadie les moleste.
Hacerles sentir mal
Aunque a nosotros haya ciertas situaciones que nos puedan parecer divertidas, para tu gato pueden ser un foco de estrés y ansiedad. Por ejemplo, si le asustas porque su reacción te parece divertida, tú te lo pasarás bien durante unos segundos, pero para él puede suponer una situación muy desagradable. Lo mismo sucede cuando le haces perseguir un puntero láser que nunca conseguirá atrapar.
Fumar junto a él
Los gatos se pueden convertir en fumadores pasivos si sus humanos fuman junto a ellos en espacios cerrados. Esto es perjudicial no solo para tus pulmones, sino también para los de tu gato, por lo que puede acabar desarrollando diferentes enfermedades como consecuencia del humo del tabaco.
Por supuesto, tampoco debes maltratarlos física o verbalmente, pues lo único que conseguirás es que tu gato te tenga miedo o se vuelva agresivo contigo. En definitiva, esperamos que gracias a estos consejos sobre cosas que no debes hacerle a tu gato consigas que tenga una buena calidad de vida. Y en el caso de que te gusten mucho los animales, seguro que te encanta alguno de los cursos de la Escuela de Veterinaria de Campus SEAS.
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