La alimentación es un aspecto muy importante para cualquier animal, pero especialmente para los perros. Por este motivo, en este artículo de la Escuela de Veterinaria de Campus SEAS te damos algunos consejos para diseñar una dieta equilibrada para tu perro. ¡Sigue leyendo!
Buena hidratación
En primer lugar, además de la nutrición, una buena hidratación es fundamental en los perros. Para que te hagas una idea, lo recomendable es que ingiera unos 60 mililitros de agua por cada kilo que pese, por lo que en la mayoría de los casos los perros tienen que beber más de un litro al día. Además, esta cifra aumenta en las hembras en periodo de lactancia, en cachorros y en cualquier perro durante los días calurosos.
En el equilibrio está la virtud
Con el fin de cubrir las necesidades nutricionales de tu perro lo recomendable es que su dieta tenga una combinación equilibrada de proteínas, grasas, carbohidratos, vitaminas y minerales.
En cuanto a las cantidades, dependen de la edad del perro. Hasta los cuatro meses de edad, debe ingerir un 10 % de su peso en alimento. Entre los cuatro y los doce meses debe ingerir un 8 % de su peso. Finalmente, a partir de los doce meses debe ingerir un 3 % de su peso corporal.
Cómo modificar la dieta de tu perro
En ocasiones es necesario cambiar la dieta de tu perro. Algunos de los motivos pueden ser obesidad, un pelaje apagado y sin brillo, un bajo nivel de energía o problemas digestivos. Lo recomendable es llevarlo al veterinario para que te aconseje algunos cambios en su dieta.
Para evitar las alteraciones digestivas, lo mejor es ir cambiando la dieta poco a poco a lo largo de una semana. Por ejemplo, al principio puedes cambiarle el 25 % de su ración, dos días después el 50 %, dos días después el 75 % y 48 horas más tarde el 100 %.
Tipos de alimentos para perros
Finalmente, vamos a ver los tipos de alimentos que puedes incluir en la dieta de tu perro:
- Alimentos comerciales: pueden ser secos o húmedos y son la manera más fácil de mantener una dieta balanceada, aunque también la más cara.
- Pienso para perros: es un alimento seco que cubre todas sus necesidades nutricionales, como proteína de carne y pescado, grasas, frutas, verduras, cereales, vitaminas y calcio, entre otros elementos.
- Comida húmeda y paté: tienen un contenido calórico alto, sabor agradable y textura suave. Además, se digieren muy fácilmente y puedes elegir entre varios específicos, como alto en proteínas de origen animal, alto en carbohidratos, alto en grasas o bajo en grasas, entre otras.
- Dieta BARF: consiste en alimentos naturales y crudos, como carne, pescado, huesos, vísceras, frutas, huevos, cereales y verduras.
- Comida casera: puedes hacer elaboraciones que cubran las necesidades nutritivas de tu perro, aunque es la opción menos recomendable, pues es más difícil conseguir una dieta equilibrada.
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